Adiós abuelita
Quien nos diría que pasariamos por esto, verdad abuelita?. Tú que en algunas ocasiones no sabias muy bien que ocurria a tu alrededor, pero siempre tenias esa sonrisa en la boca y esa alegria al vernos llegar.
Voy a contar una historia que no es triste ni alegre, es la despedida a mi abuela, porque no he tenido la oportunidad en medio de una cuarentena, de una pandemia, de hacer un duelo. Confusión, frustración, tristeza... no se puede expresar el torbellino de emociones.
Abuelita vivia en una residencia de Madrid porque tenia algun que otro despiste, ya me entendeis, además su movilidad en los ultimos años habia sido un poco reducida, en silla de ruedas. Aunque el estado de alarma no se hizo hasta el 14 de marzo de 2020, en la residencia ya no dejaban pasar a familiares desde el dia 8, y les tenian confinados para que asi no se contagiaran del covid-19. Abuelita pensaba si entenderias porque no podiamos ir a verte o estar alli contigo o sacarte a dar un paseo al sol como tanto te gustaba ver y estar con gente... La última vez que te saque de paseo con la silla me regañabas porque decias que corria mucho. Desde la residencia le hacian a mi padre videollamadas para que pudieramos verte, tu tirabas besos al otro lado de la pantalla.
El 24 de marzo tu hijo me aviso por telefono que te habias puesto muy enferma, no sabiamos si habia sido infeccion de orina dado que eras muy propensa o era el virus, dado que tenias algunos sintomas...el caso es que estabas muy enferma, muy enferma, y con medicación dejamos que descansaras alli en la casa grande como tu decias. Fue un dia duro, lleno de incertidumbre, porque abuelita, no podiamos salir, ir a verte, estar alli contigo y decirte muchas cosas. Sé abuelita que dentro de ti sabias que una parte de nosotros estaba alli, agarrandote la mano, besandote la frente. Pero mientras en casa las emociones y sensaciones eran dispares, deseaba ver a mis padres, estar con ellos, deseaba salir corriendo, abrazar a mi familia, estar junto a ti...pero no podiamos... no puedo explicartelo abuelita, la situación era...diferente?
El 25 llamo mi padre y me dijo que te habias marchado. En plena cuarentena, cada uno solo en su casa, pasamos un dia de duelo sin saber reaccion, porque la sensacion entre real y fantasia existe. Era el cumpleaños de mi pareja y no quise contar nada por él, de hecho me cuesta contarlo ahora, es una sensación extraña, no es el duelo de perderte, es algo mas. Intentamos mandarte flores a la residencia para que fueran contigo, siempre recuerdo cuanto te gustaban las flores rojas de pascua, y en navidad tenias la entrada de casa llena, siempre que me acordaba te llevaba a tu casa grande una maceta con flores de pascua por navidad. Pero en la residencia no dejaron que te llegaran flores ese dia que te fuiste, porque venian de fuera y podian infectar, estar infectadas...
Tras esperar que llamen de la compañia de seguros, llamar tropecientas veces, llamarnos la residencia...abuelita te recogieron el dia 27 por la tarde y no supimos donde estabas hasta el 30 de marzo. Llamabamos a todos lados e incluso enmedio de mi desesperacion puse anuncio en RRSS para que alguien te localizara. Nos hubiera encantado acompañarte abuelita, no estabas lejos, no fuiste lejos. Se hizo tremendamente frustrante, y yo que soy una llorona abuelita, a veces no dormia pensando en ti, en mi familia, o me escondia a llorar en la ducha otra vez de impotencia.
Amenazas de denuncias, llamadas al infinito...Se me ocurrio una idea, buscar en una app personal que trabajara en el campo de la defuncion para que pudiera ayudarme alguien, y ains, abuelita, los españoles somos gente buena...en medio del kaos que hay en el mundo con la pandemia, esa persona nos ayudo, nos atendio y empatizó, en medio dia nos habia solucionado todo, habia llamado a mi padre y a mi en varias ocasiones, de hecho en la mañana de hoy 3 de abril de 2020 me llamo a mi y a mi padre para decirnos que hoy en la tarde estaras junto al abuelo; abuelita he llorado pero porque por fin podrás descansar y cuando todo termine podre llevarte flores, de color rojo, tu color favorito, como las flores de pascua.
Una semana y media llena de incertidumbre, frustracion y tristeza...
Abuelita has sido con mucho orgullo mi abuela, la que cuando me marchaba de excusion con el cole te traia un acueducto de Segovia, con la que veia las peliculas de Marisol los sábados, la que me contaba historias de juventud ó veia fotos antiguas en tu sofá, la que veia en el parque con las amigas cuando salia yo del trabajo y me invitabas a un helado, la que nos hacia un desayuno a mi primo y a mi en año nuevo porque en nochevieja queriamos dormir con la abu, la que hacia el arroz amarillo con pollo mas bueno del mundo, la que nos enseño que un flan de huevo puede ser el mejor postre del mundo ó calentaba el pan en un brasero, has sido y serás una mujer fuerte y luchadora que llevare con mucha felicidad en el corazón. Abuelita no se hubiera sido mejor abuela, gracias por tu amor y por tus enseñanzas y vivencias.
Adiós abuelita, firmado: la Pruden pequeña
Voy a contar una historia que no es triste ni alegre, es la despedida a mi abuela, porque no he tenido la oportunidad en medio de una cuarentena, de una pandemia, de hacer un duelo. Confusión, frustración, tristeza... no se puede expresar el torbellino de emociones.
Abuelita vivia en una residencia de Madrid porque tenia algun que otro despiste, ya me entendeis, además su movilidad en los ultimos años habia sido un poco reducida, en silla de ruedas. Aunque el estado de alarma no se hizo hasta el 14 de marzo de 2020, en la residencia ya no dejaban pasar a familiares desde el dia 8, y les tenian confinados para que asi no se contagiaran del covid-19. Abuelita pensaba si entenderias porque no podiamos ir a verte o estar alli contigo o sacarte a dar un paseo al sol como tanto te gustaba ver y estar con gente... La última vez que te saque de paseo con la silla me regañabas porque decias que corria mucho. Desde la residencia le hacian a mi padre videollamadas para que pudieramos verte, tu tirabas besos al otro lado de la pantalla.
El 24 de marzo tu hijo me aviso por telefono que te habias puesto muy enferma, no sabiamos si habia sido infeccion de orina dado que eras muy propensa o era el virus, dado que tenias algunos sintomas...el caso es que estabas muy enferma, muy enferma, y con medicación dejamos que descansaras alli en la casa grande como tu decias. Fue un dia duro, lleno de incertidumbre, porque abuelita, no podiamos salir, ir a verte, estar alli contigo y decirte muchas cosas. Sé abuelita que dentro de ti sabias que una parte de nosotros estaba alli, agarrandote la mano, besandote la frente. Pero mientras en casa las emociones y sensaciones eran dispares, deseaba ver a mis padres, estar con ellos, deseaba salir corriendo, abrazar a mi familia, estar junto a ti...pero no podiamos... no puedo explicartelo abuelita, la situación era...diferente?
El 25 llamo mi padre y me dijo que te habias marchado. En plena cuarentena, cada uno solo en su casa, pasamos un dia de duelo sin saber reaccion, porque la sensacion entre real y fantasia existe. Era el cumpleaños de mi pareja y no quise contar nada por él, de hecho me cuesta contarlo ahora, es una sensación extraña, no es el duelo de perderte, es algo mas. Intentamos mandarte flores a la residencia para que fueran contigo, siempre recuerdo cuanto te gustaban las flores rojas de pascua, y en navidad tenias la entrada de casa llena, siempre que me acordaba te llevaba a tu casa grande una maceta con flores de pascua por navidad. Pero en la residencia no dejaron que te llegaran flores ese dia que te fuiste, porque venian de fuera y podian infectar, estar infectadas...
Tras esperar que llamen de la compañia de seguros, llamar tropecientas veces, llamarnos la residencia...abuelita te recogieron el dia 27 por la tarde y no supimos donde estabas hasta el 30 de marzo. Llamabamos a todos lados e incluso enmedio de mi desesperacion puse anuncio en RRSS para que alguien te localizara. Nos hubiera encantado acompañarte abuelita, no estabas lejos, no fuiste lejos. Se hizo tremendamente frustrante, y yo que soy una llorona abuelita, a veces no dormia pensando en ti, en mi familia, o me escondia a llorar en la ducha otra vez de impotencia.
Amenazas de denuncias, llamadas al infinito...Se me ocurrio una idea, buscar en una app personal que trabajara en el campo de la defuncion para que pudiera ayudarme alguien, y ains, abuelita, los españoles somos gente buena...en medio del kaos que hay en el mundo con la pandemia, esa persona nos ayudo, nos atendio y empatizó, en medio dia nos habia solucionado todo, habia llamado a mi padre y a mi en varias ocasiones, de hecho en la mañana de hoy 3 de abril de 2020 me llamo a mi y a mi padre para decirnos que hoy en la tarde estaras junto al abuelo; abuelita he llorado pero porque por fin podrás descansar y cuando todo termine podre llevarte flores, de color rojo, tu color favorito, como las flores de pascua.
Una semana y media llena de incertidumbre, frustracion y tristeza...
Abuelita has sido con mucho orgullo mi abuela, la que cuando me marchaba de excusion con el cole te traia un acueducto de Segovia, con la que veia las peliculas de Marisol los sábados, la que me contaba historias de juventud ó veia fotos antiguas en tu sofá, la que veia en el parque con las amigas cuando salia yo del trabajo y me invitabas a un helado, la que nos hacia un desayuno a mi primo y a mi en año nuevo porque en nochevieja queriamos dormir con la abu, la que hacia el arroz amarillo con pollo mas bueno del mundo, la que nos enseño que un flan de huevo puede ser el mejor postre del mundo ó calentaba el pan en un brasero, has sido y serás una mujer fuerte y luchadora que llevare con mucha felicidad en el corazón. Abuelita no se hubiera sido mejor abuela, gracias por tu amor y por tus enseñanzas y vivencias.
Adiós abuelita, firmado: la Pruden pequeña
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